domingo, 14 de agosto de 2011

0)- Introducción a los “Eventos” y a “Las Criaturas del Baúl”



Hace ya unos años, comencé a organizar puntualmente lo que acabé por llamar “Evento”: encuentros mágicos con familiares y amigos en los cuales, disfrazados todos, niños y mayores, representamos monólogos teatrales a modo de sainete o esperpento (secretos a priori para el resto de participantes), además de coreografías en equipo, y las locuras que se tercien en función de la propia situación de cada uno.

Por ese inicial motivo, empezaron a crearse una serie de peculiares personajes, todos ellos representados por alguien en algún momento, y por lo tanto, con su propio sentido, personalidad y vida posterior....

En Octubre de 2009, se me propuso publicar una serie de columnas en aDitoday (http://www.adi-today.es/columnas), sitio web absolutamente referente y líder en el concreto sector de prensa y publicaciones periódicas, como columnista que podía aportar un toque cómico en el trabajo del equipo, y pensé para ello "utilizar" a mis queridas criaturas. Aclaro ésto porque, a menudo, hay referencias del mencionado sector en mis introducciones a los teatrillos-columna, y no se entenderían fuera de su entorno si no los enmarco dentro del contexto en el cual se van publicando.

El caso es que he decidido ir “exportando” poco a poco a mi Blog, que tan poco cuido, a tan peculiares criaturas esperpénticas.

Por otro lado, las voy a “exportar” con sus introducciones originales en aDitoday, pues en ellas se ha ido generando un fenómeno que ni yo misma pude prever: el curioso y existencialista prodigio del “Las Criaturas del Baúl”, milagro que me gustaría un dia formatear, condensar y explosionar en una especie de novela tridimensional.

De hecho, es el Baúl quien ha dado nombre al Blog.

También he decidido, a costa de ser reiterativa, enlazar esta introducción aclaratoria en cada uno de los teatrillos publicados, pues creo que es el único modo de comprender de qué se habla si se lee cualquiera de ellos al azar.

Me encantaría, de verdad, que los disfrutárais con alguna sonrisa, aunque leerlos no puede compararse a verlos desenvolverse en escena.

Tened en cuenta que ninguno de ellos busca per se un valor literario en especial. Se trata de otra cosa.... De algo para ser, sencillamente, vivido.

Y quizás, incluso, todos contengan algún tipo de moraleja en su mochila, pues os aseguro que todos y cada uno de ellos expresan algo de mí, de lo que sé, aunque no sepa que lo sé.

Agosto de 2011

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